¿Y SI LO TÓXICO ES TU TRABAJO?
La palabra "tóxica" se ha instalado en nuestro léxico de una manera que en otro momento era impensable. Alejada de las etiquetas que llevaban una calavera con dos tibias cruzadas y que prevenían de sustancias mortíferas, la susodicha palabra se ha acomodado en nuestra cotidianidad para hacer referencia a las relaciones interpersonales, en especial, a las de pareja.