POR MÁS QUE TE ESFUERCES NO SIEMPRE LO CONSEGUIRÁS

Han terminado los juegos Olímpicos de Tokio 2020 y la llama olímpica ahora viajará a la romántica ciudad de París. En tres años volveremos a disfrutar con unas nuevas justas deportivas que nos harán admirar una vez más lo excepcionales que pueden ser los deportistas.

Como mencionaba en el artículo anterior*, las enseñanzas que nos dejan estos juegos son inspiradoras, pero quiero compartir tres que me han parecido interesantes. Así que, para complementar la entrada anterior, acá van las dos reflexiones faltantes:

2. Saber rendirse

Tal vez una de las decisiones más difíciles para un deportista sea la de rendirse, bien sea porque su capacidad física no le permite superar sus propios límites, o bien sea que deba hacerlo porque no tiene condiciones para continuar. Solo pensar en los años de entrenamiento para que en un instante se deba dar un paso al costado debe ser muy frustrante, sobre todo cuando escuchamos frecuentemente que no debemos rendirnos, que debemos seguir adelante, que no podemos parar...

Sin embargo, nadie nos dice que debemos aprender a detenernos, a no seguir adelante, que en ocasiones es mejor no insistir más. Es como si la palabra "Rendirse" fuera tabú  y no estuviera permitido en nuestras vidas ¿La razón? porque en nuestro inconsciente nos han dejado la idea de que hacerlo es sinónimo de fracaso...

¿Cuantas veces hemos visto atletas lesionados por ir más allá de sus capacidades? El resultado: No consiguieron lo que querían y adicionalmente quebraron su cuerpo y su mente. En este punto me pregunto: Querer algo a costa de cualquier sacrificio ¿Acaso no es también un fracaso? 

Rendirse, dar un paso al costado, o incluso, "soltar", son maneras de aceptar que en un momento determinado no podemos continuar. Que por nuestra salud integral debemos aprender a dejar ir, a aceptar que podemos llegar a obsesionarnos tanto que al final terminaremos lastimándonos y lastimando a las personas que nos importan...

3. Por más que te esfuerces, no siempre lo conseguirás.

Esta reflexión no parece muy alentadora y contradice a aquellas fórmulas de éxito que nos llegan a diario: 

"Esfuerzo + pasión + disciplina = éxito"

Normalmente nos deslumbramos con los medallistas. Sus brillantes preseas nos obnubilan y nos ocultan a todos aquellos que quedaron atrás, en aquellas posiciones menos prestigiosas ¿Qué pasó con aquellos que no ganaron? ¿Acaso todas esas personas no se esforzaron? ¿Les faltó pasión o disciplina? ¿Acaso fueron mediocres? No lo creo, y sería muy atrevido afirmarlo.

El esfuerzo, la pasión, la disciplina nos pueden llevar a superarnos de una manera impensada. Pero en este mundo hay personas que logran más cosas que otras, o tienen más capacidades, o las oportunidades coinciden con su momento, o todo esto junto y logran superar a otras ¿Justo? ¿Injusto? No se trata de eso, se trata de vivir esta vida con plenitud, dando todo de nosotros, construyendo nuestros sueños y sintiéndonos felices. No se vive para alcanzar la idea de éxito que tienen los demás, sino la que descubrimos en nuestra vida.

No importa si a pesar de nuestra lucha no logramos lo que queremos. Ningún esfuerzo es inútil (como diría Camus), tal vez nuestra labor la culminen las siguientes generaciones, o quizás nuestra tesón logre inspirar a otros. Lo cierto es que el esfuerzo, si bien no siempre nos traerá triunfos, de seguro si nos acercará a la mejor versión de nosotros mismos y nos alejará de una vida de mediocridad y falta de propósito...

 feliz día, feliz noche, feliz momento

¡Gracias por leer!

Notas:

*Artículo anterior: LA ANGUSTIA DE SER UNA REINA O UN REY 
https://respiraazules.blogspot.com/2021/08/la-angustia-de-ser-una-reina-o-un-rey.html