Abriendo abismos ante los demás.

Detrás del odio se esconde el temor. ¿Será verdad?, al parecer muchos conocedores del tema coinciden en ello. Creo que el odio tiene sus matices, como el rechazo, la aversión o la misma indiferencia, que es la forma más sutil del mismo.
Pensando en estas cosas me pregunto ¿como se le podría llamar al sentimiento de rechazar al que es diferente? ¿al que no pertenece a nuestro grupo?.

En un programa de NatGeo, planteaban un caso hipotético donde un tren iba a arrollar a cuatro trabajadores en la vía férrea. Pero había una oportunidad de cambiar las cosas, existía una palanca que al accionarla desviaría el tren.

Adivinen quien podía accionar la palanca: Uno mismo. Es decir, nos daban la responsabilidad de salvar esas cuatro vidas. Pero no todo era tan fácil, si se desviaba el tren arrollaría a otra persona que estaba en la vía alterna. ¿Qué hacer? ¿Dejar que murieran los cuatro o actuar y dejar que lo hiciera solo uno? 
La respuesta de todos los entrevistados, sin titubear; fue: ¡Desviar el tren! (finalmente cuatro es mejor que uno).

¿Y si la persona que estaba en la vía alterna fuera una persona amada? Ah, la cosa cambia y esos cuatro han dejado de importar tanto ¿verdad? Como que esa "matemática social" de un mal menor por un bien mayor, ya no pareciera aplicar más para nosotros.

¿A que va este cuento? a darnos cuenta que si no estamos involucrados afectiva y positivamente con alguien, difícilmente nos importará como persona. Puede que el ejercicio trate sobre decidir si alguien vive o no, y diremos que no tiene comparación; ¿pero si les digo que en la vida real nuestras actitudes, palabras u omisiones pueden ser tan letales como la más efectiva de las armas?.

Consideremos a esas personas que rechazamos sin conocerles. Les ayudaré un poco. Pensemos entonces en aquellos que no pertenecen a nuestro grupo... Bueno, en primer lugar aceptemos que todos nos sentimos parte de uno o varios grupos que nos definen. Estos nos ayudan a reafirmarnos, mejorar nuestra autoestima o a demostrarnos que así como somos estamos bien. Espero estar siendo claro. Así que de nuevo pensemos en aquellos que podríamos considerar diferentes a nuestro grupo: Los que profesan creencias distintas, los que tienen distintas orientaciones sexuales, los que son de otro país, tienen otro color de piel o los que pertenecen a otra línea política... el abanico es bastante amplio en realidad.

¿Como reaccionamos ante ellos? La mayoría diremos que practicamos la tolerancia con este "tipo de personas". Y sin embargo algunos diríamos cosas como: "Los respeto pero que no me vean hablando con ellos" o "Cada uno es libre de hacer lo que quiera, pero de lejos conmigo" o "pobre gente, pero quien los manda a pensar así" (compasión disfrazada de superioridad)...

Recuerdo en una oficina un empleado nuevo que empezó a laborar. Era serio, respetuoso y dispuesto a colaborar. Todo marchaba bien y los compañeros de trabajo no tenían problema con él. En algún momento se realizó una actividad fuera del horario laboral, pero el se disculpó de participar. Al cuestionarle sobre las razones, afirmó que era debido a sus creencias. Como por arte de magia, a la semana siguiente empezaron pequeñas dificultades por parte de algunos empleados hacia él. Con el tiempo, ya le preguntaban cosas relacionadas con sus creencias, solo para mostrar un falso interés mientras se burlaban solapadamente. Al final de la historia la persona no se le renovó contrato y se fue de la compañía.

Lamentablemente los ejemplos no alcanzarían para concluir este artículo. La cuestión es que algunas de esas actitudes pueden desencadenar en abusos, aislamientos, insultos, agresiones... incluso sabemos de casos donde las personas han decidido terminar su existencia ante la fuerte presión social.

¿Saben? aveces nuestros actos y omisiones alimentan estas situaciones, y lo que es peor ¡las aceptamos porque era "El curso normal de los acontecimientos"!

Deberíamos pensar en porque abrimos abismos insondables ante ciertas personas. ¿Será que al tratar de conocerlos nos simpatizarán? y si eso llega a ser así... ¿Estaremos dudando de lo que creemos, nos estaremos traicionando? No lo sé, pero ese podría ser un temor detrás del rechazo a cierto "grupo" de personas. Lo cierto es que en el momento en que lo descubramos empezaremos a practicar la verdadera tolerancia, que bien podría ser la manera mas sutil del amor.

   

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