Un pasado toca a tu puerta

Marilyn Monroe

 "Quisiera volver el tiempo atrás" le dijo mientras ella descendía del vehículo. Sorprendida, volvió su rostro para mirarle con incredulidad. "Si, volver el tiempo atrás" - continúo él-. "...Que tonto fui al perderte". Ella casi cae... ¡pero al suelo de lo sorprendida que estaba!. Su relación había terminado hacía mucho, y a ella le había costado bastante superarlo. Ahora solo eran amigos, al menos eso creía ella. -"Descansa, buena noche, hablamos luego"- fue lo único que atinó a decir ante su desconcierto. Total, ese era un capítulo cerrado en su vida...

Pues bien, más allá de lo cursi o trillado que pudiera parecer; la escena sucedió... Después de hablar de ello, pensamos si era mejor no volver a hablar con un amor del pasado.

Cuando el amor aparece entre amigos, suele decirse: "no quiero perder tu amistad". Sin embargo, después de múltiples promesas, acuerdos al viento y juramentos ante el sabio Olmo, se decide empezar una relación. Con el tiempo, sucede el cambio. Y cómo no, si después de compartir ideas, pensamientos, sentimientos, intimidad, proyectos en común, dolor, amor, etc Aquellos que fueron amigos dejan de serlo irremediablemente. Es decir, Si la relación termina no existe un botón que diga "off" y de repente vuelva la amistad de antaño. ¿por que? porque cada uno de ellos ha cambiado en relación con el otro. Han dejado de mirarse con los ojos de la amistad...

Es decir, cuando empezamos una relación somos unos... pero al terminar definitivamente ya somos otros. Y si entre amigos que deciden ser pareja, no pueden volver a serlo después de que la relación termina... ¿Cómo pretender que suceda lo mismo entre dos personas que fueron pareja sin haber tenido antes una amistad?.

Entonces... ¿no se puede seguir en contacto con la persona... con el llamado: "ex"?. Por cierto, alguien decía que en una relación; la única condición permanente era ser "ex"... porque era para toda la vida. ¿Bueno, y entonces?.

Es cierto que por nuestra vida han pasado seres maravillosos, fantásticos, con un alma prístina  cándida y no es fácil darles la espalda para siempre. Por eso, muchos continúan en contacto con esa persona con la que compartieron más que intimidad. Sin embargo no podemos llamarnos a engaños. En estos casos lo que existe entre ellas es algo muy parecido a la cordialidad, jamás aquello que alguna vez tuvieron. Pretender continuar como si nada es un juego sin sentido. Demasiado tiempo juntos, a solas, o en contacto permanente podría llevar a equívocos. No es que no hayan excepciones a la regla... pero solo son eso, excepciones.

Ni que decir cuando la persona fue todo lo contrario: manipuladora, caprichosa, controladora, etc. ¡En estos casos ni por lástima debe aceptarse entablar un contacto nuevamente!. 

En el caso de mi amiga y su "ex", se vislumbra una situación en la que fácilmente podemos caer: "egoísmo". Este es un sentimiento que se alimenta de envidia y vanidad, ¡así que cuidado!. Podemos recuperar el contacto con alguien con la disculpa de no perder a esa persona, cuando en realidad no queremos aceptar que esté con alguien más, o que haya decidido iniciar su vida sin nosotros. Sincerémonos, somos humanos... Cuantas veces no hemos escuchado decir "podrá estar con alguien más, pero no será ni parecido a cuando estaba conmigo" o "¿Crees que voy a perderle por alguien que hasta ahora aparece?".

Tal vez estemos solos, en una relación que no funciona, arrepentidos, no sé... pero en ese instante volvemos nuestros ojos a esa persona que alguna vez estuvo a nuestro lado. La contactamos, visitamos su familia, la invitamos a salir, lo que sea con tal de ser protagonistas de su vida nuevamente. Incluso no nos importa si está con alguien más; por que a la final... somos lo mejor para ella ¿no?.

Por ello, cuando una relación ha terminado lo mejor es cerrar el capítulo ahí. El tiempo y la distancia son grandes aliados. No podemos pretender estar en dos lados al mismo tiempo, o creer que podemos iniciar una vida sin dejar de seguir siendo lo más importante para otro. Para bien o para mal, las relaciones se acaban; lo cual implica dejar atrás a esa persona que tuvimos a nuestro lado. No aceptarlo, puede ser una actitud que traerá consigo tristeza y dolor. Dejemos ya de avivar un fuego de unas cenizas que quedaron... Tal vez la otra persona hace tiempo las arrojó al viento...

una buena semana... no sin  antes dejarles una frase:

"Siempre hay que saber cuándo una etapa llega a su fin. Cerrando ciclos, cerrando puertas, terminando capítulos; no importa el nombre que le demos, lo que importa es dejar en el pasado los momentos de la vida que ya se han acabado" Paulo Coelho

De este asunto podemos hablar más...