Esa burbuja que nos separa

Ha sido un día particularmente frío, y en estas tierras donde no estamos acostumbrados al invierno; las medias y cobijas se han puesto a la orden del día. Una taza caliente de café acompañó una charla con una amiga de otra ciudad, quien hace poco tuvo una decepción amorosa al confiar nuevamente en una persona que no le había hecho bien en el pasado. Le comenté sobre la idea de este blog y me dijo que era mejor crear una página de solteros -. ¿Para que? ¿que te gustaría encontrar ahí?.- le dije. "No sé, al hombre con el que permaneceré el resto de mi vida" vaya...

Bueno....¿Y quien no quiere?.

No debemos culpar a Disney de este natural deseo de encontrar la persona perfecta para nosotros. Claro está que en las historias de Waltt Disney el príncipe llega a salvar el día, atractivo, seguro, callado... sobre todo callado. Los de Disney saben que si habla demasiado de seguro arruinará el momento. "calladito se ve mas bonito" dicen las mamás.

Digamos que encontramos a ese alguien que revive las mariposas en nuestro estómago: ¿Esa es la señal para saber que es la persona adecuada?. Puede que sí, pero el tiempo, el inexorable tiempo nos cambia el paisaje y las mariposas de ayer, hoy nos producen náuseas o "rebote" como dicen por acá. Siguiendo la línea Disney, Podríamos culpar al supuesto príncipe azul: "No amiga, era como de contrabando por que se decoloró con el tiempo, no aguantó mas de dos lavadas".

En esto se nos puede ir la vida buscando la persona adecuada si no nos sinceramos y hacemos la pregunta del apóstol Judas: ¿Seré yo maestro?. En muchas ocasiones nuestros compartamientos están dominados por una burbuja que nos separa de los demás y se llama miedo, el cual adopta distintas formas: miedo a perder a la persona, a no ser aceptados, a no hacer lo correcto, a perder el control, etc. lo cual nos puede llevar a situaciones extremas que actúan como el blanqueador en la capa azul: sumisión, jugar a ser jefe, o demasiada complacencia, tratar de controlarlo todo, ser posesivos, y un largo etcétera.... ¿nos rendimos?

  

¡Que va! debemos tener en cuenta que somos seres únicos, individuales y por eso nos complementamos con otras personas. Por eso el amor propio es esencial para no perder lo que realmente importa o respetamos en nuestra vida, y que podemos dejar a un lado "por culpa de otros", por supuesto sin permitir tampoco que los demás dejen de ser ellos mismos por influencia nuestra. Nuestra cultura y sociedad nos han hecho dependientes, pero no por eso debemos seguir siendo así ni dejar que los demás lo sean...

Que la noche nos regale dulces sueños...